La actividad médica requiere una evaluación sistemática que determine el adecuado cumplimiento de las reglas que le corresponden, es decir, determinar la calidad con la cual brinda sus servicios de salud, de modo que la institución pueda asegurarse de brindar la mejor atención médica posible teniendo en cuenta los procedimientos, uso de recursos, entre otros. La labor del auditor médico se ve, a veces, entorpecida, ya que este no posee las herramientas para la evaluación de procesos y la construcción de indicadores de salud propias de la epidemiología; esta permite, a la larga, crear estrategias para medir la calidad. Por …
La práctica médica diaria requiere la toma de decisiones sobre actividades preventivas, diagnósticas, terapéuticas y pronósticas, así como sobre el comportamiento de las enfermedades en las comunidades. Para lograr estos objetivos se apoya en los conceptos epidemiológicos no siempre bien conocidos. Los estudiantes de las disciplinas de la salud también afrontan esta inestabilidad porque las universidades orientan sus currículos hacia las áreas clínicas del diagnóstico y tratamiento, existiendo dificultades para entender o trasladar los resultados de una investigación a la práctica clínica diaria por la forma en que habitualmente se presentan los resultados
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar su experiencia y nuestros servicios analizando su navegación en nuestra web y cómo interactúa con nosotros y poder mostrarle publicidad en función de sus hábitos de navegación. Para consentir su utilización, pulse el botón “Acepto”. Puede obtener más información consultando nuestra Política de Cookies.