Joaquín Londáiz presenta una nueva colección de primeras lecturas dirigida a los más pequeños. Con ilustraciones a color.

Esta colección está protagonizada por cinco animales de circo que, tras la colisión de un meteorito cerca del lugar donde están acampados, descubren que tienen superpoderes. Poderes que utilizarán para salvar al mundo de los malvados planes de los villanos que se van encontrando durante su gira circense.

Mitch, el león, es el líder del grupo y adquiere una fuerza colosal. Shalma es una cocodrilo muy curiosa y descubre que puede hacerse invisible. Blink es una guepardo muy presumida y su poder es la supervelocidad. Vasyl, el elefante, puede mover objetos con la mente. Hip y Hop son dos hermanos chimpancés que tienen una superelasticidad fuera de serie.

La vida de Ellyot Tomclyde da un vuelco cuando, en un campamento de verano, entra en contacto con el mundo mágico...

Elliot tiene 12 años y vive en Québec. Su vida no tiene nada de extraordinario hasta que, en un campamento de verano, conoce a un hechicero, Goryn, que lo lleva a un mundo llamado Hindenwood.

Allí, Ellyot conoce a los responsables de los cuatro elementos (agua, tierra, mar y fuego) y estos le cuentan que él es descendiente de un hechicero muy poderoso y que debe ingresar cuanto antes en la escuela para magos de Hidenwood. Antes, sin embargo, Elliot debe realizar unas pruebas para averiguar a qué elemento pertenece y el resultado es insospechado: ¡es igual de poderoso en los cuatro elementos!

Al final, Elliot empieza su formación en la escuela del elemento Tierra y todo va bien hasta que alguien roba la Flor de la Armonía el día de la celebración de su florecimiento. Todo indica que se trata del maléfico Tánatos, que amenaza con romper el equilibro del mundo mágico...

Los juegos Olímpicos están a punto de empezar y las Superfieras se han desplazado hasta el estadio para vigilar que nadie intente sabotear la ceremonia de inauguración.

Una turbulencia sacudió la supercaravana como si un gigante la hubiese cogido con sus manazas y la hubiese zarandeado. Estábamos sobrevolando Londres donde las nubes están garantizadas prácticamente todo el año. Se iban a celebrar los Juegos Olímpicos y nos habían encargado la seguridad de la ciudad. Sin duda, debíamos mantener los ojos bien abiertos. Cualquier villano podría aprovechar el acontecimiento para demostrarle al mundo su poder.

La ceremonia inaugural estaba siendo todo un éxito y había llegado el momento de encender la llama olímpica cuando, de repente, las luces del estadio se apagaron y un sonido ensordecedor resonó sobre nuestras cabezas. En seguida comprendimos que algo no iba bien pero nunca nos hubiéramos imaginado que ese algo... «¡caerían del cielo!».

Joaquín Londáiz presenta una nueva colección de primeras lecturas dirigida a los más pequeños. Con ilustraciones a color.

El viento era gélido y soplaba con tanta fuerza, que hasta la supercaravana parecía tiritar de frío. Estábamos al norte, muy al norte. Una llamada de socorro nos había llevado hasta allí.

Una desaparición misteriosa, un almacén vacío cerrado con diez llaves plateadas, unos diminutos seres negros, un bosque oscuro y una fortaleza de hielo salida de la nada#

¡Chuletas y chuletones! Aquello iba a ser difícil de resolver.

Joaquín Londáiz presenta una nueva colección de primeras lecturas dirigida a los más pequeños. Con ilustraciones a color.

Era una noche tranquila, como otra de tantas. Hasta que, de pronto, dejó de serlo. Un resplandor iluminó el cielo y un meteorito colisionó muy cerca de donde estábamos acampados.

Creedme, desde entonces, algo cambió en nosotros. Sin saber cómo, aquel meteorito nos otorgó a mí y a mis compañeros unos poderes sobrenaturales que nos cambiaron la vida para siempre. Pero, por lo visto, la radiación no solo nos afectó a nosotros. En el lugar del impacto se formó un cráter gigante y de él empezaron a salir un centenar de hormigas.

¡Qué digo hormigas! más que hormigas eran HORMIGOSAURIOS.

Los padres de Elliot han desaparecido juntamente con toda la tripulación del crucero en que viajaban...

Elliot y sus padres están disfrutando de un crucero por las islas del Caribe. Elliot se ha llevado uno de los libros que Goryn le regaló, pero como lo acaba enseguida, decide volver a su casa para coger otro. Y al volver de nuevo al barco, descubre que algo extraño está pasando: ¡no hay nadie! Al final, oye una voz de auxilio que proviene del camarote del capitán y cuando llega allí sólo ve un loro. De repente, el loro también desaparece y mientras Elliot lo busca se da cuenta de que todos los relojes están parados y marcan la misma hora: las doce menos seis minutos. En ese momento Elliot decide volver a su camarote y se encuentra a con Úter, el fantasma maestro del ilusionismo, quien lo traslada hacia el mundo mágico. Allí se reúne con los miembros del Consejo, que determinan que se trata de un secuestro, probablemente urdido por la pérfida mente del malvado Tánatos, que ha salido de la cárcel.

Más tarde, mientras Elliot lee los periódicos para investigar qué se sabe del incidente, un terremoto sacude su casa y del suelo del salón salen cinco aspiretes del fuego. Afortunadamente, Úter consigue devolverlo al mundo mágico. Y es él quien le explica lo que la leyenda muerta de los Triángulos. Antes de existir los espejos, los triángulos eran el medio de transporte del mundo mágico; se utilizaban cristales de un material llamado Traphax. El problema era que en el traslado desaparecían personas de las que nadie volvía a saber nada, y se decía que iban al Limbo de los Perdidos.

¿Pero existe en realidad el Limbo de los Perdidos? Y lo más importante, ¿dónde están los padres de Elliot?

Cuenta una profecía que tres Elegidos, venidos de lugares remotos, salvarán a la Atlántida de la catástrofe que se cierne sobre ella.

El misterioso halo que envuelve la luna es la señal de que el caos y la oscuridad se ciernen sobre la Atlántida. Hasta ahora, el continente ha permanecido oculto a los ojos humanos gracias a un poderoso escudo que está a punto de romperse. Remigius Astropoulos, Botwinick Strafalarius y Archibald Dagonakis, máximos representantes de los poderes atlantes, se enfrentan a una situación desconcertante y sin precedentes.

El rey Fedor IV ha desaparecido justo cuando el ejército rebelde se dispone a invadir la Atlántida. ¿Acaso es una casualidad?

Joaquín Londáiz presenta una nueva colección de primeras lecturas dirigida a los más pequeños. Con ilustraciones a color.

Esta colección está protagonizada por cinco animales de circo que, tras la colisión de un meteorito cerca del lugar donde están acampados, descubren que tienen superpoderes. Poderes que utilizarán para salvar al mundo de los malvados planes de los villanos que se van encontrando durante su gira circense.

Mitch, el león, es el líder del grupo y adquiere una fuerza colosal. Shalma es una cocodrilo muy curiosa y descubre que puede hacerse invisible. Blink es una guepardo muy presumida y su poder es la supervelocidad. Vasyl, el elefante, puede mover objetos con la mente. Hip y Hop son dos hermanos chimpancés que tienen una superelasticidad fuera de serie.