Memes y discursos marginales de internet que se apropiaron del debate público.A principios de la década de los 2000, un aburrido joven norteamericano creó 4chan (forchan), un punto de reunión para los marginales que habitaban el ciberespacio.
El sitio web, que comenzó como mero entretenimiento para individuos que pasaban mucho tiempo delante de sus computadoras, pronto se convirtió en una usina de cultura con capacidad de infectar buena parte del planeta. Así, 4chan captó la atención de los medios masivos de comunicación, los partidos políticos, la academia y hasta el FBI.
A través de diferentes campañas que incluyeron hostigamientos masivos …
Memes y discursos marginales de internet que se apropiaron del debate público.A principios de la década de los 2000, un aburrido joven norteamericano creó 4chan (forchan), un punto de reunión para los marginales que habitaban el ciberespacio.
El sitio web, que comenzó como mero entretenimiento para individuos que pasaban mucho tiempo delante de sus computadoras, pronto se convirtió en una usina de cultura con capacidad de infectar buena parte del planeta. Así, 4chan captó la atención de los medios masivos de comunicación, los partidos políticos, la academia y hasta el FBI.
A través de diferentes campañas que incluyeron hostigamientos masivos a figuras públicas (y no tanto) 4chan construyó un poder de fuego mediático que, entre otras cosas, ayudó a Donald Trump a llegar a la Casa Blanca. También, se convirtió en un espacio de germinación para narrativas marginales, teorías conspiranoicas, operaciones de guerra psicológica y propaganda neonazi. Es decir: terreno fértil para los discursos radicalizados.
Este libro cuenta la travesía de la cultura 4chanera para salir de la marginalidad total y convertirse en una parte fundamental de la cultura actual. Incluso en la Argentina, hoy.
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